lunes, 13 de junio de 2011

En calma por el puertaco

1990 metros que arrancarle de sus frías manos y un puñado de ilusos locos que estábamos dispuestos a enfrentarnos a el.



La etapa de la Ragua a sido toda una experiencia para mi, en la que tengo poco que contar y muchas ilusiones vividas que asimilar. Y es que este sábado no he entrado en batallas yermas con la intención de subir a mi bola y poder disfrutar de los bellos paisajes que este puerto brinda a todo aquel que quiera mirar.

La etapa era desconocida para mi, con lo que me prepare un pequeño croquis que me diera una idea de lo que mas o menos me encontraríapor allí



Pero viendo lo preparadisimo que asistió Víctor el benjamin del grupo y todo un futuro campeón, me dio vergüenza el tan solo sacar mi chuleta. Pues Víctor traía consigo las dos vertientes del puerto imprimidas de Altimetrias.com ¡¡¡Se me tenia que haber ocurrido!!!

La  etapa la empecé en La Calahorra y subí sin demasiado esfuerzo, pues tenia en mente que esta era la parte corta con 13.8Kms así que puse ritmo cómodo y pedalada tras pedalada me encaje en la cima en una horita mas o menos. Lo unico destacable fue que pasado los 1500mts de altitud yo notaba una pequeña falta de oxigeno, pero la verdad que nada fuera de lo común, y que las pulsaciones me bajaban conforme notaba que mis pulmones se llenaban con menos cantidad de aira con cada respiración.




En la cima la temperatura cambio de forma drástica y hubo que abrigarse un poco en busca de mitigar sus efecto, pero esto era de esperar a esas alturas, por lo que al principio del descanso fue algo frió, pero por suerte duro poco, pues en un par de kilómetros y se estaba a gusto. El resto de la bajada fue bastante rápida, pues había rectas interminables con el peligro de que acababan en curvas bastantes cerradas, pero el tomarla con tranquilidad nos hizo llegar a todos de una pieza y sin percance alguno.

Una vez llego a Cherin y tomado una Coca-Cola a precio de cubata, retomamos el regreso por el mismo lugar que vinimos, lo cual suponía 25.1 Kms de puertaco que realizar. Nuevamente pongo mi ritmo sin mirar a nadie, pues ni quería ir forzado ni tampoco frenado. Así que agacho el lomo y para arriba. Al poco me había quedado solo, pues nadie puso mi misma marcha, y es que los de delante iban mas fuerte y los de detrás mas flojo.




Antes de la bajada había tomado el LAP de este nuevo tramo para medir la distancia, con lo que mas o menos tenia controlado por donde iba en todo momento, o mejor dicho, lo que me quedaba para llegar, así que en mi tranquilidad pude disfrutar de una subida en silencio entre cantos de pajaros, rumores de agua por doquier y unas vistas espectaculares propias de un puerto pirenaico.

Llegue arriba y pare tan solo lo suficiente para abrigarme y salir rápido en busca de cotas mas bajas en donde las temperaturas eran mas cálidas, así que tan solo me deje caer y en poco tiempo volví a estar en el lugar donde empezó mi periplo ciclista de este bien planeado día por unos de los mejores club de Málaga (C.C. Ferroviarios de Málaga)

Tras quitarme el traje de romano nos fuimos a un mesón en el que el gran Juan Arevalo ya tenia pactada una mesa para darnos un festín culinario que nos supo a gloria entre charlas y muchas risas.

Suma fina: Gran día vivido junto a grande compañeros de pedales, y tanto en la retina como en la mente quedará para la posteridad esta etapa que se rememorara una y otra vez a lo largo del tiempo.











1 comentario:

  1. muy bonita subida por sus dos vertientes y mejor compañia.
    PD;Toni pasame la foto que me hechaste en el cartel del puerto ok.

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