Nos vemos en las carreteras: Invocando a la vestia

Un año y otro año tanto tiempo ya
tantas pedaladas como latidos
y esto parece que vuelve a marchar
kilómetros y kilómetros bajo mis ruedas vuelven a pasar
para que las piernas comiencen su despertar...

Mi resumen del entrenamiento de febrero del 2012 comenzaba así en mi blog, y este año he querido repetirlo a modo de ritual para ver si por lo menos consigo el mismo nivel de forma que logre alcanzar entonces. ¡¡¡Que mala es la desesperación!!!...

Ya no se que pensar, miro en mi Polar y solo encuentro 4 salidas en bici en todo el mes de Febrero, ¡¡¡vaya desastre!!! Vale que han sido muy buenas y propicias en perfil, vale que no me puedo quejar de como me han ido y respondiendo las patitas de atrás, ¿¿¿pero solo 4??? ¡¡¡JODER!!!
Mi único salvavidas esta siendo la natación, que es lo que creo que me da ese puntito para aguantar y mantener mi humilde estado de forma. Pero claro, al no ser un entrenamiento especifico veo como me voy quedando sin gas tras los compañeros de ruta y como en las subidas mantengo un ritmo a duras penas con toda mi alma.Y he visto claramente como tras un puerto largo el resto de etapa las patitas de atrás se quedaban vacías por la falta de kilómetros.

Y ahora toca mirar lo positivo, aunque de forma fugaz he conseguido rodar en las cabezas de grupo y también en los primeros puertos importantes de esta temporada al menos he conseguido subirlos a una velocidad mas o menos buena. No todo va a ser malo ¿nooo?

Aunque me esta costando bastante por mi condición de cabeza loca en febrero sigo manteniendo una lógica progresión en lo que a kilómetros por ruta se refiere, y es que este año no quiero que me pase como en el anterior que en abril ya estaba harto de bici y algo pasado de rosca. Pues la verdad para mis objetivos casi que ya alcanzo las distancias necesarias a falta todavía de tres meses de entrenamiento.

Bueno, poquito a poquito espero ir mejorando mi estado, lo único es la incertidumbre de no saber si estoy haciendo lo correcto dentro del escaso tiempo que dispongo.